¡Ojo con tus emociones negativas!, te pueden hacer engordar
Las emociones controlan todo tu ser. Pueden dictar las reglas de tu día a día e incluso el resultado tras cierta acción; por eso quienes saben del tema afirman que controlarlas es vital para el sano desarrollo de la humanidad.
Existen emociones positivas y negativas, todas se deben sentir, porque no se trata de mitigar unas y dar protagonismo a otras; al contrario, debes saber que existen y en cualquier momento te pueden hacer explotar, por eso tienes que aprender a controlarlas.
Cuando te sientes abrumado por emociones negativas como el aburrimiento, la ansiedad, el estrés o la tristeza, recurres a la comida para tratar de sentirte mejor y acabas comiendo en exceso. Es decir, muchas veces tu sobrepeso o condición de salud negativa, está ligada a tus emociones.
Presta atención a este hecho:
Según un informe de Harvard Health, el estrés puede apagar el apetito, en otras palabras, tus emociones y la comida tienen una relación muy estrecha. Esto sucede porque cuando te estresas, el sistema nervioso envía mensajes a las glándulas adrenales, localizadas encima de los riñones, para producir adrenalina.
Esta hormona es la que ayuda a disparar la respuesta del cuerpo de “pelear o correr”, según se explica en la investigación, se trata de un estado psicológico alterado que pone el hambre en pausa.
El problema es que después de todo este proceso, las glándulas adrenales se activan con más fuerza, todo para liberar otra hormona del estrés, el cortisol, que aumenta el apetito y, potencialmente, la motivación para comer.
Es aquí donde se presenta el inconveniente mayor, porque tu cuerpo se enfrenta a dos situaciones distorsionadas que lo alteran de alguna forma.
¿Entonces, vale la pena estresarte?
Aprende a controlar tus reacciones a partir de lo que sientes y no tendrás mayores dificultades. La vida tranquila siempre te dejará mejores resultados.
Luz Stella Solano M.