Hoy suelto el rol de víctima, mientras siga quejándome, buscando culpables por lo que me sucede estaré sumergido en las profundidades del victimismo sin hacer nada. Me lleno de poder cuando me hago responsable de mi vida, de mis acciones y decisiones y de los resultados que tengo. La vida sucede para mí, y a través de mí.

Ir al contenido